Las personas con un Sol en Tauro otorgan una gran importancia a la vida amorosa y por ello son sumamente lentas a la hora de tomar una decisión al respecto. Necesitan reflexionar y meditar durante mucho tiempo sobre las posibles consecuencias que una nueva relación podría acarrearles. Sin embargo, una vez han logrado tomar la decisión, se entregan totalmente a la persona amada. Debido a ello y a su fiel y sincera forma de ser, las rupturas son poco frecuentes y la vida sentimental se les presenta, por lo general, feliz.
Las personas con el Sol en este signo son muy tiernas y afectuosas. Quizá su único defecto se deba a su instinto innato de posesividad y al que siempre acabará por convertirse en su peor enemigo: ¡los celos!
Muy maternales y envolventes, su forma de amar podría recordarnos a veces al amor que despliega «mamá gallina», hacia sus polluelos cuando quiere protegerlos resguardándolos bajo sus alas. Aunque este matiz tan maternal y protector pueda despistar
un poco a primera vista, hay que tener en cuenta que las personas con el Sol en Tauro son muy sensuales y sus relaciones suelen estar bañadas por una gran dosis de pasión.